Seleccionar página

¿Sabías que ya se le llama así?

La cuesta de septiembre es uno de los dos momentos clave a lo largo del año en el que las familias se ven obligadas a hacer los mayores desembolsos económicos motivados por exigencias propias del momento; mientras que la cuesta de enero se origina por el exceso gasto navideño, la de septiembre se crea por el gasto vacacional y la obligación de hacer frente a los gastos antes descritos e inevitables, como facturas de luz y gas y gastos escolares, entre muchos otros…

Uno de los últimos barómetros publicados en nuestro país en los que se preguntaba a la población sobre sus preocupaciones destacaba por encima del resto el de la subida de precios y la inflación. No es de extrañar ya que en abril de este año los precios repuntaron al 4,1% respecto al año pasado, ocho décimas más que en marzo. De hecho, nunca había sido tan caro hacer la compra en España como actualmente y si no, solo tenemos que pensar en aguacates y papas…

Si te está costando superar esta cuesta te aconsejo que elabores un presupuesto, que leves un excel o trabajes con alguna app para llevar tu contabilidad, que compares precios y vayas a diferentes lugares para ahorrarte todo lo que puedas, un poquito de restricción, economizar gastos como el transporte entre otros microgastos que también pueden generar un efecto compuesto que te esté asfixiando y no utilizar las tarjetas de crédito sin control. Además de si es necesario aplazar pagos para mayor comodidad y poder hacer frente a todo, pero recuerda, trata de generar mayores ingresos para que en Enero no se sumen las dos cuestas y puedas salir de este tipo de situaciones…

¡Recuerda que yo puedo contar cómo, tan solo tienes que escribirme y te explico!

Comparte esta entrada en tus redes sociales
Share on Facebook
Facebook